Nuevo Mundo en solitario...

Circunstancias de la vida, el destino ha querido que hoy no me acompañase nadie más que unas cuantas bandadas de perdices y un pequeño grupo de cabras montesas, con un macho impresionantemente grande y otro no tanto, además de algunas hembras...

En fin, puesto que iba solo y a mi ritmo, me he permitido el lujo de no madrugar tanto. A las nueve en pie con los aperos listos y desayunando, y a las diez menos cuarto, más o menos, en la burra dándole a las bielas, desde donde siempre...

En aproximadamente hora y media estaba ya en La Chanata comiendo algo, un lomillo y uno de esos geles que tanto me gustan... Y de postre una pastillita de dextrosa... mmmmm... que riiiica... AAAAYYY sorpresas gastronómicas!!! lo que te he echado de menos hoy!!!

En menos de 20 minutos estaba ya otra vez en el sillín camino del desvío de la Casa de La Nieve, por donde se accede a Nuevo Mundo, y en otro ratillo, menos de una hora, ya estaba allí... Parada técnica para tomar otro gelecillo y evacuar fluidos corporales varios... Hasta aquí la cosa ha sido fácil. Aunque al inicio me costó coger el ritmo tanto como para pensar en volverme, de La Chanata en adelante he ido muy bien y rápido. Desde aquí en adelante empezaría mi pequeño calvario... Y es que en unos 6-8kms el desnivel a salvar es de unos 500m, y eso, después de casi 30km y unos 800m de desnivel es para pensárselo, pero en fin, estaba en el punto de no retorno así que "parriba"...

Las primeras rampas, aunque muy duras, se pasan con relativa facilidad y han puesto en mi cara esa sonrisa de "voy sobrado, esto está hecho"... Al pasar La Casa de La Nieve ya iba "forzaillo" así que era hora de alternar el plato mediano con el pequeño... Pronto se me borraría esa sonrisilla de la cara... Al pasar La Mina de San Diego, las rampas son paredes, el suelo está, no roto, lo siguiente, y todavía quedan al menos 4-5kms... Nuevo Mundo está a la vez tan cerca y tan lejos que no sabes si seguir sobre la bici o bajarte, ya que a lo mejor irías hasta más rápido, pero no... Sigo en bici, automotivándome como buenamente puedo, ya queda poco, y otra revuelta y otra y otra rampa... En fin, en algo más de una hora he llegado a lo alto de Nuevo Mundo, uno de los "dosmiles" de la Sierra de Gádor Daliense... Allí, frío y viento, como siempre...
Abrigarse, comer otro poco, llamada para dar señales de vida, unas fotillos y de vuelta por el mismo camino... Y poco más... Una rutilla preciosa que aunque es dura, se puede hacer más o menos bien...

Hasta la próxima...