Bicicleteando por Almería, España y El Mundo... nO sIn mI bIcI es un blog dedicado a todos aquellos que no se imaginan su día a día, su ocio, sus vacaciones, sus fines de semana... sin su bici. Siempre en compañía de nuestro pequeño ciclo-alforjero, es un lema, un modo de vida...
Qué difícil puede llegar a ser organizar y seleccionar el material para hacer uno de estos vídeos resumen, especialmente si hay miles de fotos y vídeos. Nosotros solemos llevar cámara compacta (una de esas todo terreno), gopro, otra cámara de mejor calidad y claro, los teléfonos, que son capaces de captar momentos rápidamente y con una calidad bastante razonable. Con todos esos aparatos funcionando a todo gas, si os digo que hemos recopilado más de 1000 documentos, entre fotos y vídeos, y me estoy quedando corto. Es realmente difícil hacer una selección que llegue a captar la atención del que no ha viajado.
Tras la selección del material visual, toca seleccionar el audio. Que tenga una estructura bonita, con cambios de ritmo para poder jugar con el propio ritmo del vídeo, que dure unos 5 minutos para que no se haga pesado etc. En este caso, la ganadora ha sido " Thank you ", de la banda de Indie-pop islandesa DIKTA.
Cuando consigues unir todo eso en un montaje que no desentone demasiado has terminado, ya solo queda verlo y disfrutarlo...
No quiero dejar pasar la ocasión sin agradeceros a todos los que nos habéis estado siguiendo vuestro tiempo y vuestro interés. A veces, durante este tipo de viajes, estás muy cansado, porque el día ha sido duro, porque te ha costado encontrar camping, porque has llegado a las tantas y te ves montando la tienda de noche, y realmente no tienes ganas de nada más que de ducharte, cenar y acostarte. Pero entonces entras a echar un vistazo en el blog o en el Facebook y te encuentras no sé cuántos "me gusta" y más de 100 lecturas en la crónica anterior y claro esas tonterías te dan ánimos y fuerzas para, en mitad de la noche y con todo el camping roncando, sentarte bajo las estrellas y escribir la crónica del día... GRACIAS.
Y bueno, respecto a las aventurillas estas, ya sabéis lo que pienso, no hay mejor manera de viajar, de conocer lugares y sus gentes... Es algo que se debería probar al menos una vez...
No soy más mascón, os dejo el vídeo. Espero que os guste...
PD: siguid echando un vistazo al blog de vez en cuando...
Buscando princesas, caballeros, dragones y castillos, pusimos rumbo a un mágico valle en el que es posible que no los viésemos, al menos con nuestros ojos, pero cuando hemos mirado a través de los de Jose, hemos descubierto, como cada año, lo alucinante de viajar en bici. En su carita se refleja puro y cristalino cada km, cada paisaje. Todo es ilusión... Y a través de él, volvemos a hacer realidad nuestros delirios ciclo-alforjeros...
Esta vez, como muchos sabéis, lo planteamos de forma diferente. Decidimos coger la furgo y en tres jornadas plantarnos en Nevers, donde iniciaríamos la ruta en bici. Desde el principio todo ha salido bien, perfecto, cumpliendo con lo planeado durante meses. Fuimos completando etapas con la libertad que te da saber que no tienes un billete de avión al final de la ruta y por lo tanto, una fecha tope. Teniendo esto resuelto, o más bien abierto, teníamos la libertad de pararnos en cualquier parte y las veces que nos apeteciera. Y así ha sido. Libertad total. De vuelta para casa hemos hecho las etapas a la inversa, lógicamente, pero saliendo desde Amboise.
Rodando alegres, hemos avanzado sin demasiado esfuerzo por una gran variedad de paisajes, caminos y carreteras, a cual más interesante. Los pueblos que hemos ido atravesando, o mejor dicho viendo desde el otro lado del río, hubieran sido todos merecedores de un final de etapa. La mayoría con una bonita iglesia y su pequeño castillo o fortaleza. Los camping, muy buenos, tenían la particularidad de estar en el lado opuesto al pueblo, en ruta y a orillas del Loira, con la bonita estampa nocturna que proporciona la buena iluminación de sus edificios más significativos.
El tiempo ha sido espectacular, poca lluvia y poco calor, eso sí, viento de cara todos los días. Quizá, una buena opción sería hacerla en dirección contraria, es decir, de oeste a este. Aun así, no era muy fuerte...
Nos hemos encontrado fuertes, hasta que cogí la infección de estomago. Ana ha arrastrado una molestia en la rodilla desde la tercera etapa, que ha sido algo molesta, pero le ha respetado. Jose? Ese es un caso aparte. Viajero de nacimiento, campista por naturaleza, callejero por herencia y espero que ciclista. De momento lleva buen camino. No se puede portar un niño mejor. Más de 20 días fuera de casa, durmiendo cada día en un sitio diferente, en tienda, casa, hotel, pensión, le da igual... Me tiene preocupado. Cuando sea mayor no le veremos el pelo...
Nos hubiera gustado compartir el viaje con nuestros amigos Ainhoa, Agus y los pequeños y por supuesto, hemos echado muchiiissiiiiiimo de menos a nuestra otra mitad, esos con los que nos hemos reído, discutido, peleado, disfrutado en el Danubio, en Alemania, Austria, Dinamarca, Islandia, Francia... Sin ellos no es lo mismo, Superbikeman y Yonkicol, o Topaco y Tilalá. Pero nos encantó ir al encuentro de Tío Héctor y Tía Celia en Briare y conocimos muchas familias que como nosotros, disfrutaban en familia de estas maravillosas aventuras...
En un viaje como estos, terminas conociéndote a ti mismo y a quien te acompaña. Con una sola mirada puedes saber qué tal va sobre la bici, si hay que aflojar o correr más, si paramos a descansar o si va todo bien.
Nos traemos infinidad de material que tendremos que visionar y ordenar. Con tantos días y etapas, uno llega a tener un auténtico caos mental. Es tiempo de poner en orden nuestros recuerdos...
Como siempre digo, es muy recomendable probar esto al menos una vez, o más bien, es obligatorio. Hay que salir de la zona de confort, aunque creo que para mí, cada mes de agosto, sobretodo últimamente, ésta es en realidad mi zona de confort...
A todos los que nos habéis seguido leyendo las crónicas a través del blog, que se que habéis sido muchos, espero que hayáis disfrutado como nosotros. Nos han hecho mucha ilusión los comentarios y los me gusta, así como las muchísimas visitas al blog. Nos hace sentir que vamos acompañados...
Queda pendiente la ultima entrada con la peli, claro,pronto, para el que quiera verla, mientras tanto ahí va un pequeño aperitivo...
Dos noches en Chaumont sur Loire no han sido suficientEs para recuperarme. Estoy mejor, eso sí. Voy comiendo y recuperando poco a poco, pero como es lógico, hemos decidido aparcar las bicis y continuar con la furgo.
Como comente en la crónica anterior, dedicamos el segundo día a recuperar la furgo, que estaba en Nevers. Así que nos ponemos en marcha. Tren hacia Orleans ara allí coger una conexion hacia Tours, muy cerca de donde estábamos en un principio ( lo que es no saber ), y vuelta en otro tren hacia nuestro destino, con otro cambio de tren. Total tres ue Jose se ha portado estupendamente. Cada día nos sorpr nade con algo, es increíble. Ya sé que es mi hijo, y que estoy programado genéticamente para decir sólo cosas buenas de el, pero es que es increíble. Es un auténtico viajero.
Tras las tres horas de tren, avituallamiento en el camping de Nevers, aseo y vuelta a Chaumont, ya con la furgo. Y Jose perfecto. Todo el día viajando y como si nada... Llegamos, descanso, ducha, cena y a la cama.
Al día siguiente, hoy, empaquetamos todo, bicis al portabicis y rumbo al castillo de Chanonceau para luego llegar a Amboise, a un hotelillo...
En cuanto al castillo: muy bonito. Construido sobre el río Cher, se puede navegar él canoa, Kayak, etc. No hemos podido hacerlo. Tiene lista de espera. Está muy bien decorado con todos los enseres y utensilios de la época y haciendo una cola de más de una hora, se puede visitar. Merece la pena? Si eres capaz de hacer la enorme cola al solano... Yo a sabiendas me lo replantearía. Tiene muchas opciones alrededor, jardines, fuentes, espacios naturales y verlo por fuera. Gente a espuertas también, pero bueno. Nosotros ya que estábamos, hemos entrado...
Al acabar la visita, a buscar el hotel y a descansar, mañana ya veremos...
Bueno, pues después de la mejor etapa viene la peor. No porque el paisaje sea feo o el tráfico sea intenso. Ha hecho un calor horrible, el suelo ha sido básicamente bueno, como siempre, pero ha habido un par de tramos insufribles. Además, las molestias de ayer han sido intensas y la noche mala, no he dormido nada. Me acosté sin cenar y he salido sin desayunar. Calor, molestias gasto-intestinales, noche sin dormir, un encanto...
Salimos ya con calor a pesar de las bajas temperaturas de esta noche. Los últimos para variar. A pesar de ser prácticamente una zona de acampada libre, este camping regentado por una pareja de abuelos nos ha gustado mucho.
Yo me encuentro fatal, y decidimos acercarnos a Blois y buscar hotel. Por el camino paramos en un pueblo cercano, yo no puedo más. El calor me termina de derrotar. Intentamos buscar alojamiento lo más cerca posible, pero es imposible, es fin de semana y el lunes es fiesta en Francia así que está todo full. Continuamos, yo ante este panorama prefiero ir tirando poco a poco a ver si encontramos algo nos cuadre de camino. Llegamos a Blois y preguntamos, y nada, full. Continuamos hasta Cande sur Beuvron y tampoco. En el parque de este pueblo hago varias llamadas pero nada. De repente, uno de los alojamientos nos llama, tiene una fantástica habitación disponible. Está en el final de etapa previsto y aunque queda un poco, allá vamos, a sabiendas de que dormiríamos en cama.
Dos noches hemos pagado. Estoy exhausto. Me encuentro mal. Ahora toca descansar y recuperar. El pueblo tiene castillo y es bonito. Y como mañana estaremos parador hemos decidido ir a por la furgo que está en Nevers. A partir de aquí y en función de cómo me encuentre, seguiremos unos días en furgo, todavía no suenan cosas por ver...
Fría noche, muy fría. Estas últimas acampadas están siendo más duras de lo que esperábamos. Vamos con los sacos de verano y la verdad es usamos echando en falta los de invierno.
Esta ha sido la mejor etapa hasta el momento. El paisaje es excepcional, se nota que la zona es patrimonio de la humanidad por la Unesco. El tiempo fantástico, el terreno estupendo. Variedad. Pueblos, levee, carreteras secundarias, muy secundarias, sin tráfico. Navegación muy fácil. Teniamos que tomar un par de decisiones a la hora de elegir por donde ir al castillo de Chambord.
Como siempre, salimos del camping tranquilamente, los últimos, o casi. Sin prisas cogemos la ruta que está en la misma puerta. Rápidamente llegamos a Muides sur Loire donde teníamos que cambiar de margen para continuar unos kms más hasta Saint Dyé sur Loire. Allí pararíamos a comer algo y tomaríamos un desvío hasta el castillo de Chambord. Pues así lo hemos hecho. Al poco de coger la variante, la ruta nos mete aproximadamente durante 6 km en el bosque privado de caza del Conde de Chambord. Espectacular paraje repleto de coníferas varias y Robles que se cierran sobre nosotros hasta oscurecer el soleado día... Pronto llegamos al castillo, que aparece de repente por nuestra izquierda.
Al llegar al castillo nuestra perspectiva cambia. De repente, nuestra preciada tranquilidad se ve rota por el gentío. Claro, castillaco, día de lujo, agosto... Imaginaos la cantidad de criaturas. Bueno, nada que en realidad no esperáramos. Es hora ya de comer, así que decidimos parar en la primera terraza que se nos cruza. Después visitaríamos el castillo.
Tras la comida, rumbo al castillo. Este merece un capítulo aparte. Un enorme edificio con innumerables torres súper decoradas con labrados. Piedra blanca, tejados negros. Muy bonito, pero recargado, supongo que reflejando la ostentosidad de la época, y de la clase social, claro. Tiene dos plantas y la azotea. Repleta de habitaciónes, como para alojar a un pueblo entero. Una escalera de Caracol gigantesca que hace de distribuidor. Chimeneas enormes. El Conde de Chambord y familia debían de ser minúsculos porque las camas parecías cajas de mistos. En fin, es algo je sin duda merece la pena ver.
Visita realizada, toco ir en busca del camping. Ya hace calor y aunque las peores las hemos pasado en el castillo, hemos sufrido bastante. Además algo me ha caído fatal y voy con problemas gasto-intestinales... Rápidamente llegamos al camping, que nos asalta, y tras decidir si nos quedamos allí o tiramos, tomamos la opción lógica; estamos cansados, a plantar la tienda que ha sido un día duro...
Si eres de nuestra quinta, seguramente habrás disfrutado de las aventuras de Athos, Porthos y Aramis acompañando a Dartacan en " Los tres mosqueperros". O tal vez fueses más cultivado y optaste por la novela de capa y espada de Alejandro Dumas publicada en 1844, o tal vez viste la peli o quizá mejor, las es cosas... Total, esta novela narra las aventuras de Dartacan, perdon, D'Artagnan, en su viaje desde Meung sur Loira hacia París... Pues bien, nuestro avituallamiento mañanero de hoy, ha sido en ese pueblo.
Salimos a las 10:42 hz del hotel asado de Orleans. Una vez bien provistos de viandas abandonamos el bufé rumbo a la habitación con el boleto de terminar de cerrar alforjas y partir... Mañana fría pero soleada, con viento de cara. Aquí el poniente o del oeste es el viento predominante en esta época, y como nosotros llevamos rumbo oeste, pues a tragar airecillo. A mí no me molesta mucho, pero a Ana le está costando algo más. Es cuestión psicológica. Tenerlo de cara siempre, sin estar muy acostumbrada a rodar con en esas circunstancias puede ser desquiciante. Pero bueno, la cuestión es que hemos rodado relativamente cómodos y del tirón hasta hasta el pueblo de la novela de Dumas. Allí hemos echado un ratico, hemos comido algo y hemos continuado.
Seguimos rodando tranquilos por paisajes de ensueño. Una fotillo aquí otra allí, pasa delante que te grabo, en fin, todas esas cosas de los viajes. Y antes de darnos cuenta estábamos en Beaugency, nuestro destino de hoy, buscando el camping, que hoy toca cueva. Y adivinad donde estaba. Sí, exacto, al cruzar el puente. En este viaje todo está resultando estar al cruzar el puente. Los hemos cruzado de todos los tamaños, tipos, colores, longitudes, con acera, sin ella, con carril bici, sin él, hasta los s hemos cruzado entre el tráfico... Y los que nos quedarán... Tenemos un auténtico y enorme glosario de puentes, los puentes de los castillos del Loira. Aquí hay muchos más puentes que castillos, de momento. Aunque de aquí en adelante cambiará, supongo.
Desde Sully sur Loire, toda la zona está declarada por La Unesco, Patrimonio de la humaidad, tanto por su interés histórico como por el arquitectónico y natural.
Total, que llegamos al camping a eso de las 14:00 hz, montamos, comemos, ducha y para el pueblo a verlo, que hay castillo-abadía. El pueblo es bonito pero no tiene mucho. Quizá sea de los menos bonitos que hasta ahora hemos visto. Cenamos por ahí al las 19:30 hz!!! Y para el camping a descansar...
Mañana tenemos la primera de las variantes que vamos a realizar en el viaje. Rodaremos a no me acuerdo que castillo que está en no recuerdo que pueblo y dormiremos en no sé que camping. En la próxima crónica procuraré dar más información.
Pues si, aquí estamos, en Orleans. Hoy han caído 51 km y aunque nos lo hemos tomado con calma, estamos cansados. Estaremos aquí un par de noches y trate remo de conocer un poco la ciudad...
A sabiendas del kilómetro metraje de hoy, decidimos levantarnos algo más temprano. Ha sido una noche fría, la que más. Según el tiempo hemos llegado a unos 8 grados. Yo me levante a ponerme la chaquetilla. La mañana ha salido soleada pero el sol no calentaba, y no lo ha hecho hasta la tarde...
Hoy hemos salido a las 10:20 hz. Como viene siendo habitual en este viaje, la ruta estaba en la puerta del camping, literalmente. En los primeros kms hemos tenido muchos cambios de paisaje, así como de piso. Del mejor y más rápido para rodar hasta los peores, de esos de tierra que meten las dos ruedas del croozer sobre hierba alta impracticable. Paisajes, como siempre alucinantes. Hemos rodado muy bien, despacio pero sin pausa y rápidamente hemos llegado a Chateauneuf sur Loire, donde debíamos tomar otra decisión; continuar según la ruta marcada en mapas y guías o tomar un desvío alternativo que si bien venía en la guía, no estaba señalizado ni como EuroVelo 6 ni como La Loire a Velo. Una dcecision así hay que meditarla bien y si es con el estómago lleno, mejor. Así que a comer. Aquí la oferta era interesante y estaba todo en la misma plaza. Fácil, ha,burguesaca pq los tres y a rodar... La decisión? Ruta alternativa no señalizada. Por qué? Decía la guía que en la margen norte tiene mejores paisajes, si cabe, y además, los dos siguientes camping estaban en ese lado así que eso hemos hecho, margen norte. Debíamos tomar una carretera, la d960 durante un kilómetro para girar a la izquierda en un desvío señalizado para ensuguida alcanzar La levee. Gran palabra. No es más que el dique que venimos siguiendo. Está a ambos lados del río y sirve para contener las crecidas del río y así protegerlos terrenos y viviendas colindantes... Encima hay siempre un camino que casi siempre está asfaltado. Continuamos por ahí hasta llegar a la segunda decisión de la jornada. Jargeau. Pueblo donde debíamos quedarnos en su camping o continuar por el canal de de Orleans. Las ganas de llegar a la ciudad de Juana de Arco nos han podido. El camino por el canal era muy malo. Con más de 40 km en las patas, volver a esos caminos odiosos ha sido duro y ahí quizá hemos tenido el paisaje menos vistoso. Incluso hemos tenido que desenganchar el croozer para pasar una barrera.
El canal nos ha metido directamente en la ciudad. Debiamos atravesarla entera por la margen del río, viendo sus bonitas casas, iglesia y catedral. El camping municipal está al otro lado, a 2 km del centro, pero por el camino ha aparecido un hotel, yo he aflojado la marcha a ver si Ana lo veía y picaba, y así ha sido. Oigo una voz que me dice, "Jose, ahí hay un hotel, preguntamos? Me faltado sitio para parar. Llegada al hotel, por suerte hablan español y listo. Hotelaaaaaasssssooo que ya toca. Las burras y el croozer a cubierto, duchaca, cama grande que lo flipas y a descansar...
Mañana a conocer la city, comeremos por ahí y luego ducha y más ducha y cama y más cama. De aquí en adelante, nuestra ruta cambia un poco. Iremos en busca de castillos que ya los hay. Pararemos donde encarte para verlos y variaremos nuestro trazado y llegaremos hasta donde nos dé tiempo y/o tengamos ganas...
Pues si, aquí estamos, en Orleans. Hoy han caído 51 km y aunque nos lo hemos tomado con calma, estamos cansados. Estaremos aquí un par de noches y trate remo de conocer un poco la ciudad...
A sabiendas del kilómetro metraje de hoy, decidimos levantarnos algo más temprano. Ha sido una noche fría, la que más. Según el tiempo hemos llegado a unos 8 grados. Yo me levante a ponerme la chaquetilla. La mañana ha salido soleada pero el sol no calentaba, y no lo ha hecho hasta la tarde...
Hoy hemos salido a las 10:20 hz. Como viene siendo habitual en este viaje, la ruta estaba en la puerta del camping, literalmente. En los primeros kms hemos tenido muchos cambios de paisaje, así como de piso. Del mejor y más rápido para rodar hasta los peores, de esos de tierra que meten las dos ruedas del croozer sobre hierba alta impracticable. Paisajes, como siempre alucinantes. Hemos rodado muy bien, despacio pero sin pausa y rápidamente hemos llegado a Chateauneuf sur Loire, donde debíamos tomar otra decisión; continuar según la ruta marcada en mapas y guías o tomar un desvío alternativo que si bien venía en la guía, no estaba señalizado ni como EuroVelo 6 ni como La Loire a Velo. Una dcecision así hay que meditarla bien y si es con el estómago lleno, mejor. Así que a comer. Aquí la oferta era interesante y estaba todo en la misma plaza. Fácil, ha,burguesaca pq los tres y a rodar... La decisión? Ruta alternativa no señalizada. Por qué? Decía la guía que en la margen norte tiene mejores paisajes, si cabe, y además, los dos siguientes camping estaban en ese lado así que eso hemos hecho, margen norte. Debíamos tomar una carretera, la d960 durante un kilómetro para girar a la izquierda en un desvío señalizado para ensuguida alcanzar La levee. Gran palabra. No es más que el dique que venimos siguiendo. Está a ambos lados del río y sirve para contener las crecidas del río y así protegerlos terrenos y viviendas colindantes... Encima hay siempre un camino que casi siempre está asfaltado. Continuamos por ahí hasta llegar a la segunda decisión de la jornada. Jargeau. Pueblo donde debíamos quedarnos en su camping o continuar por el canal de de Orleans. Las ganas de llegar a la ciudad de Juana de Arco nos han podido. El camino por el canal era muy malo. Con más de 40 km en las patas, volver a esos caminos odiosos ha sido duro y ahí quizá hemos tenido el paisaje menos vistoso. Incluso hemos tenido que desenganchar el croozer para pasar una barrera.
El canal nos ha metido directamente en la ciudad. Debiamos atravesarla entera por la margen del río, viendo sus bonitas casas, iglesia y catedral. El camping municipal está al otro lado, a 2 km del centro, pero por el camino ha aparecido un hotel, yo he aflojado la marcha a ver si Ana lo veía y picaba, y así ha sido. Oigo una voz que me dice, "Jose, ahí hay un hotel, preguntamos? Me faltado sitio para parar. Llegada al hotel, por suerte hablan español y listo. Hotelaaaaaasssssooo que ya toca. Las burras y el croozer a cubierto, duchaca, cama grande que lo flipas y a descansar...
Mañana a conocer la city, comeremos por ahí y luego ducha y más ducha y cama y más cama. De aquí en adelante, nuestra ruta cambia un poco. Iremos en busca de castillos que ya los hay. Pararemos donde encarte para verlos y variaremos nuestro trazado y llegaremos hasta donde nos dé tiempo y/o tengamos ganas...
A veces es necesario parar un día, una tarde, y descansar, disfrutar de un buen baño en la piscina con tu hijo y tu mujer, pasear por el pueblo, cenar por ahí... Ayer fue día de eso, llegamos a un camping que no teníamos previsto, nos gusto y nos quedamos. Comimos allí mismo y tarde libre...
Esta mañana ha amanecido encapotado. Hemos hecho las alforjas y hemos tirado. La ruta la teníamos en la misma puerta. Hacia fresquete, al contrario que ayer, que hizo un calor más propio de nuestra tierra... Como siempre por aquí, viento de cara, no muy fuerte, pero lo justo para ralentizarnos. Paisaje magnífico. Suelo perfecto. De lujo. Al poco de salir, parada para intentar comprar algo que echarnos a la boca. Imposible. Lunes, todo cerrado. Pues continuamos y en un rinconcito chulo paramos. Por delante tenemos una decisión. En el próximo pueblo debemos elegir entre seguir la ruta señalizada dando un rodeo importante y con cuestas o coger una carretera con tráfico, la d951 y acortar y quitarnos las cuestas. Llevo unos 50-60 kg así que eso ha podido. Hemos tomado la carretera pensando que al ser lunes con todo cerrado y agosto vacaciones quizá habría poco tráfico. Y así ha sido. Poco tráfico. Los hemos hecho rápido y atentos a la señalización que nos devolvería a la ruta. Y antes de darnos cuenta estábamos de vuelta.
En un par de patadas, ya divisábamos a lo lejos nuestro destino de ayer, que es al final el de hoy; Sully sur Loire, con su magnífico castillo. Un inciso: en la corta etapa de ayer, mi queridísima y ajada banderilla de AFP, la que llevo sobre el Croozer, desaparecio, probablemente en algún árbol. Jose se agarró un cabreo importante. Total, que llegamos a ese enorme y majestuoso castillo y nos volvemos a encontrar con una de tantas familias que vemos en ruta y en los camping, en particular una que creo que h más coincidido en todos los lugares. Nos saludamos amigablemente sin parar y al darme la vuelta para ver dónde andaba Ana, veo que la llevan ellos!!! Nos acercamos y les explicamos que era nuestra y que la habíamos perdido. Rápidamente nos s cuentan que estaba en un árbol y que por eso la cogieron. Tratan de devolvérnosla, pero Ana les dice que no, que mejor la cambiamos por la suya y rápidamente, uno de sus pequeños ha cogido un rotulador y le ha pintado una calavera, un barco y su nombre. Jose, por supuesto, quería la nuestra y estaba cabreado sin querer salir del croozer y al verlo, pero l hijo, ha cogido que n juguete suyo y se lo ha regalado a Jose... Mañana van a Orleans, como nosotros, así que intentaremos verlos de nuevo e inmortalizar el intercambio. Así que sí, una bandera de AFP se quedará aquí en Francia...
Tras ver el castillo, nos despedimos de nuestros amigos y continuamos hacia el camping. Nuevamente está en ruta, junto al río y tiene parques y piscinas. Todo está resultando muy fácil y agradable en esta ciclo-aventura y eso, se agradece, es una tranquilidad...
Mañana tendremos una etapa más dura, casi 50 km, hasta Orleans. A ver si podemos con ellos, estamos cansaillos...
Etapa larga y dura. Hemos sufrido mucho. Hemos pasado un calor terrible y nos ha costado sudores llegar hoy... Nos hemos perdido varias veces y la ruta nos ha llevado por carreteras con tráfico intenso hacia castillos cerrados que por supuesto estaban todos en lo alto de colinas... Vamos, precioso...
Este fin de hemos tenido la visita d tía Celia y tío Héctor. Hemos dedicado el tiempo a descansar turistear por Briare, pueblo pequeño pero con mucho encanto. Hemos hecho un montón de cosas... Paseo en barco por el Canal de Briare, por cuál, por lo visto, haciendo conexiones se puede llegar casi hasta París, pasamos por una esclusa para arriba y para abajo con el barco, nos paseamos con Jose en coche de pedales por el pueblo pero sobretodo disfrutar de la compañía...
Esta mañana nos hemos despedido con penica de ellos y hemos salido en busca de la ruta. Sol, brisa, buen piso, todo apuntaba a un gran día de bici... Nada más salir, como siempre, Jose tiene hambre, así que paramos a hacerle un bocata. A ver si de aquí en adelante nos acordamos y lo hacemos antes de salir... Seguimos rodando y la ruta empieza a meternos por caminos de esos que me gustan tanto; toboganes rompe-piernas con suelo de tierra y con las ruedas del croozer en el césped. Menos mal que íbamos atravesando bosques... Cambiábamos rápidamente de terreno y eso lo ha hecho menos duro. Al salir del bosque, ahí vamos, la carretera se empieza a inclinar hacia arriba hasta el punto de tener que meter el plato chico, y así hasta llegar al castillo de Saint Brisson sur Loire donde hemos intentado entrar, pero parecía cerrado. Continuamos hacia Saint Martin sur Ocre parando antes a comprar un poco de pan... La ruta sigue llevándonos por carreteras con poco tráfico. Continuamos esta vez sin problemas y rápido llegamos a Gien. Precioso pueblo al que se llega cruzando, como siempre, un puente fantástico sobre el Loira. Tiene castillo, y lo que tienen estas cosas, pasamos justo por la puerta de un camping a orillas del río, con parques, piscinas, bar al más puro estilo biergarten... En fin, está todo dicho... Jose quiere un camping con piscina desde hace días, así que este es hoy nuestro destino.
Que etapa maaaaaas dura, han salido la friolera de casi 13 kms!!!!! Jejejejeje... En lugar de llegar a Sully sur Loire, nos quedamos aquí. Dormiremos en una tienda-cabaña que está sobre un banco a orillas del Loira viendo Gien y su castillo...
Este tipo de viajes es lo que tiene. Te encontrarás con multitud de cosas o lugares que te gustaran mucho y con los que no contabas. Como no tenemos billetes de avión, ni fecha de vuelta, ni obligación de hacer esta u otra etapa, ni nada, pues si pasa lo de hoy, te paras y disfrutas... Y mañana ya veremos...
Menos mal que ayer decidimos tirar para acortar la etapa de hoy porque nos ha salido casi 50 km, más de lo que hubiera sido sin acortar... Ja! Nos hemos perdido, ya estábamos tardando...
La noche ha sido fría y muy húmeda. No hemos pegado ojo, bueno Jose si. Tras las lluvias la mañana ha salido cubierta para a lo largo del día haber nubes y claros. Viento llegando a fuerte...
La puesta en marcha hoy, nos la hemos tomado con calma, ya que teníamos reserva de un bungalow en el camping de Briare. Allí nos veríamos con tía Celia y tío Héctor...
Salimos del camping, buscamos ruta y a rodar. Buen firme, fresquito, sale el sol, vamos rápido, total, un lujo. Por primera vez nos encontramos con ciclo-alforferos que van en la misma dirección que nosotros en un lugar de en contra. Paramos a tomar algo y se nos escapan. Pero bueno, la verdad es que hoy nos hemos encontrado a más de uno. A los pocos kms llegamos a un punto en el que tenemos que coger una carretera transitada, momento en el que nos encontramos una familia de ingleses a los que nos pegamos para hacer un solo grupo compacto e ir más seguros. Llegamos a un pueblo y tras cruzar un puente sobre el canal lateral del Loira, éstos giran a la izquierda donde teníamos que girar a la derecha. Aquí ha sido donde nos hemos perdido. Los ingleses se paran a comer y decidimos tirar. Confundimos señales y nos encontramos subiendo un puerto, con todo nuestra carga, yo llevo más de 50 kg, y decimos parar y mirar mapas. Esto no me cuadra, las señales han cambiado y según las guías estamos lejos del Loira y del canal. Vamos hacia el pueblo que debemos ir pero estamos dando un rodeo muy grande y por montaña. Además, se ve una carretera muy grande y transitada que debemos seguir. No me gusta. Vamos a darnos la vuelta hacia el punto donde nos perdimos... Toso esto nos ha hecho perder unos 10 km y bastante tiempo y esfuerzo pero bueno, cuando viajas en bici estas cosas pasan... Total, llegamos al pueblo y preguntamos en la "i" de información turística. Lo que sospechábamos, debimos girar a la derecha, de hecho allí estaban bien puestecicas peeeeroooooo así es este mundo... Por cierto, nos hemos llevado un susto gordo cuando ha aparecido uno de esos "caminos" que tan buenos malos recuerdos nos traen, uno de esos en los que solo caben las ruedas de la bici y poco más, solo que este era de tierra de la mala, una ricura. Menos mal que ha durado poco... Bueno, por las horas que eran decidimos quedarnos por ahí a comer.
Retomamos ruta y sí, encontramos camino pero las señales nos mandan al p..o césped pegado al canal!!! Venga yaaaaa!!! Preguntamos y sí, es por ahí pero que tranquilos que dura poco. Aaayyyy si tú supieras... Pero llevaba razón, ha durado muy poco. A continuación seguimos por muy buenos caminos asfaltados, pista forestal, dique, algunas carrterasy canal hasta llegar al camping... Paisajes muy bonitos en los que el viento nos ha destrozado. Buscábamos como locos con la mirada en el horizonte, alguna arboleda que nos proteja, solo llegando nos hemos metido en un bosque bien protegido...
Aquí estaremos un par de días, por tanto, mañana lo dedicaremos a turitear por aquí, que el pueblo promete, y así descansar... Hoy y mañana toca caaamaaaa...
Desde que abres un ojillo en la tienda hasta que sales del camping pueden pasar hasta tres horas. O por lo menos a nosotros nos pasan. Dos camping van y dos camping de los que salimos los últimos, me refiero a los ciclo-alforjeros, que por aquí hay muchos. Pues eso, te despiertas, le quitas el tapón a la colchoneta y aprovechas ese minuto que tarda en salir el aire para dormir, sales, vas al baño, empiezas a recoger, desayunas, te vistes, vistes al peque, sigues recogiendo, te sientas, sigues recogiendo, en fin, y así todos los días; esa es básicamente la dinámica del ciclo-alforfero cada mañana... Cuando vienes a iniciar ruta, miras a tu alrededor y estás solo en la zona biciclistas, miras la hora y piensas: pues si que madruga aquí la gente... Bueno, anda tira...
Salimos a las 10:55 hz, 25 minutos antes que ayer, vamos mejorando... La ruta a pie de camping prácticamente... Hoy teníamos previsto rodar rápido hasta Sancerre e intentar llegar a comer allí. Etapa corta de descanso; 27,5 km. Pero barruntando barruntando hemos decidido contemplar la opción de dar un tirón más supeditado a cómo y a qué hora llegásemos finalmente... Hemos rodado bien, rápido y del tirón por unos paisajes muy bonitos, buen firme en el canal y carril bici, e incluso en las carreteras de tráfico reducido... La mañana ha salido encapotada y justo antes de salir ha empezado a lloviznar... Por suerte ha parado pronto. Nos hemos encontrado bien y pronto hemos llegado al primer destino; Sancerre, bonito pueblo encaramado a una colina que se veía n lontananza desde el camping. Como estaba la recepción cerrada, hemos ido a buscar donde nos den de comer. Un chiringuito junto al Loira, pescado frito tipo boquerón pero de río, hamburguesa a de competí y listos, ala, empaquetados... El camping no nos ha gustado y ha empezado a llover. Con lo incómodo que es plantar la tienda lloviendo, pues pa eso damos un tirón y llagamos a otro camping, hemos dicho ls dos... Venga, búscate un camping cerca y de paso eso que le restamos a la etapa de mañana... Pues este ese, aquel el otro... Venga veámonos que toca mojarse...
Carril bici y otro canal (esto está lleno) y todo bajo la lluvia, suave pero constante, fresquete y gran paisaje, esto es muy bonito... Antes de darnos cuenta estábamos en nuestro destino, no sin antes recorrer a pata el arcén izquierdo de una carretera muy transitada con la que no había contado... Justo antes del puente sobre el Loira estaba el camping, muy muy chulo, como si fuera un parque súper tranquilo, sin parcelas claramente delimitadas y con zona común a cubierto, todo un lujo para los cansados campistas...
Luego vueltecilla al pueblo, muy chulo, unas comprillas (por fin) y de vuelta al camping con Jose sobre mis hombros... Toca cenar, ducha, crónica y a encuevarnos... Ha sido un gran día... Mañana etapa como la de hoy, 35-40 km, bien, suaves, y a encontrarnos con tía Celia y tío Héctor... Aaaahhh y dormiremos bajo techo, yuuuhuuuu!!!
